GERARDO BURTON
bio/biblio:
Gerardo Burton nació en Buenos Aires, Argentina, en 1951.
Publicó hasta la fecha: Poemas iniciales (Botella al mar, 1971); 18 poemas azules para María y Con la esperanza delante (de
Escribió durante tres años una columna diaria de humor denominada Punto y aparte, firmada con el seudónimo de Clarquén, en “El diario de Neuquén”. Es co-guionista y conductor de programas de humor radial. En ese campo, ha escrito radioteatros utilizando como base fundamental la parodia de otros géneros -cine, historieta, teatro, televisión-.
Es periodista -oficio que desempeña actualmente- y editor de libros. Como tal ha compilado y diseñado la edición de la obra completa de Roberto Arlt, entre otras. Tradujo artículos y poemas del inglés y del francés, y el libro “Aullido”, de Allen Ginsberg. Desde 1986 reside en la ciudad de Neuquén, en el norte de
DE "LOS JUEGOS OCULTOS Y CORAZÓN DE AGUAS", BS.AS.,
tango
volvió en la noche
y yo la esperaba
temblando
yo la esperaba
con mi espalda vacía
con mis manos como ramas en invierno
volvió a cerrar la puerta
desnuda ya del mundo
y yo la esperaba
pero ella se fue tras la muerte
que no la amó tanto
cuando el alba subió por las ventanas
sus ojos se cerraron
XVIII
el amor a horas oscuras es lo habitual
pero también sonríe en los cuentos que tejemos con los niños
el amor crece, además
en las horas ladronas del trabajo
esa distancia exigida por dinero, medida en deseo y soledades
y sé que en tus ojos
el amor espera todo el día
el amor es el otro de nosotros
que acompaña a cada uno
DE "INFIERNO SIN UMBRAL", BS.AS., ÚLTIMO REINO, 1989
hospicios
en san vicente
todos bailan
todos ríen
todos cantan
en san vicente
afuera también
NO ESPERES YA, ALMA MÍA
los placeres de la piel
-esos secretos goces en la penumbra
no habrá más sueños, luces, muslos encendidos
o el dulce resplandor en tu carne satisfecha
una melancolía sostiene
la resignada sucesión de belleza
ante tus ojos
AH, BABILONIA, ME EXTENUAS Y TE AMO
y tus muros y recodos
cubiertos de basura, y tu piel
bella bajo los reflectores
llevan el número de mis derrotas
ah, babilonia, tus pies en el aire
tus voces, tus canciones
y el embrujo con que me tienes atrapado
las cenizas del fuego que te hará nacer, pura como nunca
ya sin necesidad de colgar versos en el otoño
y ya sin verte, tan lejos estarás
no sabes cómo te amo
ni tus mujeres reconocen mi mirada
ni las cadencias
de esta voz que perdura más allá del alcohol y los relojes
no, babilonia, no me tendrás
mientras los soles se ponen y tus moradores se duelen
no dejas lugar
no dejas sitio
te crees la noche, y eres miserable
nadie en tus lunas podrás beber, maldita
cómo me has arrojado de tus ijares
como me desgarraste las retinas
ah, babilonia, los platos sucios se acumulan
y eres inhóspita como la verdad, como el delirio
y mi pobre territorio, pequeña
ya no existes más que en mi alma,
babilonia querida
querida traidora
DE “POESÍA PATAGÓNICA”, NEUQUÉN, FUNDACIÓN BPN, 1991
resplandores
uno
cuando tu cuerpo resplandece
el mar no alcanza para contenerlo
cuando la luz trasiega de tu piel al aire
no ya tus ojos son el centro
sino el breve amor que prometimos
con enardecidas palabras en habitaciones ajenas
y cuando se levantan tus pechos, cuando el asombro con vos
ya no es posible
pues el oleaje ha sido atravesado
descansan tus muslos, esos guerreros imbatibles
que preparan el próximo combate
tu cuerpo es el único fulgor
dos
horizontal, tu cuerpo resplandece
como la meseta bajo la luna
como una noche sin fondo
con estrellas colgadas pero con tu luz
horizontal, tu cuerpo es el viento
que repite nombres
besa
enciende
fecunda el silencio terrible
DE “4 SONETOS”, NEUQUÉN,
4
Hay caricias de la luz sobre una espalda,
y agua en los pliegues de la carne celeste,
y fuego en el sexo que piernas defienden;
hay también la marea en la orilla calma,
y ojos en la sombra y la boca devora
para colmar un hambre que no se sacia
en cumbres ni en honduras, o anheladas
tibiezas del cuerpo leve que reposa.
Enigmas halla el buscador sorprendido
de mieles, oros y temblores ya perdidos,
es la nave, son las olas y una mujer
que fulgura de noche como estrella
sin eclipse posible, desnuda ella
de esa absurda ilusión de poseer.
DE “POESÍA Y CUENTO PATAGÓNICOS”, NEUQUÉN, FUNDACIÓN BPN, 1993
identidad
eres un cuerpo en el vacío
y crees
que el vacío es el alma
la más mía, la lejana
un amor puede ser el atajo
o la atadura
un camino o un destino según los ojos
los besos
y las orillas que elija para reposar
un cuerpo, animal o sombra
luz o aire imprescindible
miente cada mutación
nunca lo conquistas sino vencido
y, como el amor
exige un vuelo y un despojo
el náufrago en la playa
tiene sólo sed, no memoria
DE "AIRE DE PENUMBRAS", Bs.As. ÚLTIMO REINO, 1995
un poco de leña
para el invierno en el sur
un beso en el atardecer
y esperar el sueño blanco
la luz alcanza
y sostiene
los cuerpos sin sombra
cuando el viento ondula
esas nubes que besan el cielo
entre uno y otro labio
y queda la sed
los ruidosos vuelos de las aves
en el ocaso
aletean en la hendidura
el vacío, la ausencia
son sólo las orillas de la luz
no prevalecerán las puertas de la muerte
pues ojos nuevos en los huesos vacíos
y un corazón donde piedra hubo
y labios que besan cavernas
en su verdor perdurarán
porque todo es celeste, el aire
y los ojos y los labios
y el sabor del tiempo en la lengua
que atrapa el horizonte como hormigas
como abejas, como miel y leche
en la tierra que todavía es sueño
en el cuerpo de esa mujer tan esperada
que también es sueño
ELLA
ella es el mejor cantar
desde los abismos y las cumbres
es el primer y principal canto de amor
allí donde las aves migran
pero no se atreven navíos ni ejércitos
¡allí donde termina el mundo conocido!
es el cantar más puro
cuando las márgenes esquivan a los naúfragos
y el espacio se pierde
en constelaciones ignoradas
donde la vida es posible
es ella con su llamado
ardiente de deseo
ella habita un cuerpo
que reverbera en el lejano mediodía del delta
donde transforma en nardos los juncos
que se inclinan a su paso
es suyo el canto amoroso
del alba
y en sus ojos gotas de rocío rutilan
hasta que la luz
no deja restos de sombra
en ellos
que son limpios como su aire
que edifica refugios para los rústicos peregrinos
buscadores de la cifra del amor
que es, simplemente, el canto de ella
a cada hora, mientras las mareas
dejan al retirarse los últimos vestigios
de civilización que la adoraron
aun sin conocerla
DE "POESÍA NEUQUINA DE LOS '90", CÓRDOBA, NARVAJA EDITOR, 1996
quemar las naves
poco importa el fervor de la carne
pues no se añora la marejada:
el otro yo es un reflejo
sin voces ni sombras
permanece de adán apenas un residuo
en la multiplicación de tu gesto
hay todavía barro de la mesopotamia en tus pies
no dejes
la lluvia caer
sin haberte preguntado dónde, dónde
vas a estar cuando el ocaso
b.a. blues
hueles un aire
flores, vegetales en la humedad
todo es verde en la medianoche
cuando mueren los aromas
y sólo el sudor de cuerpos en reposo
mantiene el contacto con el mundo
flores, vegetales en la humedad
insectos recuerdan la lluvia junto al río
flores podridas
vegetales en la humedad
un triste llamado
DE “POESÍA Y CUENTO DE LA PATAGONIA ”, NEUQUÉN, FUNDACIÓN BPN, 1998
EL AMOR
una cacería sin presa
ni cazador
sólo una urdimbre astuta
y cielos abiertos
para dar la última brazada
hacia la otra margen
y luego volver, o no
DESIERTO, BESTIA CALLADA
persigues la luz sin hallarla
en una tierra
que no miente más promesas
deja al cielo en su sitio
es lo más sensato
y que tiemblen las ventanas
dios o el viento
o ambos
llaman, y tú temes
Publicar un comentario