María Cecilia Moscovich
Mencionada por:
Carina Radilov Chirov
Menciona a:
Fernando Callero
Francisco Bitar
Analía Giordanino
Carina Radilov Chirov
Julián Bejarano
Bio/biblio:
Nací en 1978 en Santa Fe, donde vivo. Estudié Historia y ahora soy profesora en la secundaria; además trabajo en promoción de la lectura en proyectos del estado y de organizaciones no gubernamentales. Coordiné talleres de lectura y escritura en el Pabellón Juvenil de la cárcel de mi ciudad, y en un barrio de mi ciudad, para niños.
En 2009, una serie de poemas mía salió publicada online en la revista de poesía plebella. Este año (2010) saldrá publicado mi primer libro, La Manguera, en editorial Diatriba, del poeta Fernando Callero y Santiago Pontoni.
También escribo para chicos, me otorgaron una mención por novela juvenil en Editorial Comunicarte, y ahora estoy intentando conseguir publicar algo.
Poemas:
La manguera
Me compré una manguera
con que regar mis plantas.
Sucede que ahora
tengo un patio inmenso.
Un patio inmenso, sí
para mí sola.
Hay un níspero, un naranjo,
malvones, jazmín del Paraguay
taco de reina.
Hay muchísimas palomas y colibríes,
un sol redondo que cuelga del cielo,
justo arriba de mi patio.
Hay una santa rita
que enciende llamaradas
los días de sol
y los días de lluvia
me susurra que estoy sola.
No hay ningún perro
y ningún novio entra tampoco por aquí.
Entran los amigos
y sobre todo mis libros
y mis pensamientos.
En el patio para el cual compré la manguera
corren sombras de otros tiempos.
Son sombras ajenas
(puesto que esta casa antes no era mía)
sombras que se escabullen un poco
cuando llego
(como un gato blanco que resbala
hacia el fondo
cada vez que abro la puerta).
En mi inmenso patio
inmenso como el mundo
o al menos como mi cráneo
canta siempre un benteveo
Bicho Feo me llama
y a lo mejor tiene razón.
En el fondo crecen
aloes,
burrito,
menta,
tomates.
Siempre surge una ignota planta
que sembró el viento
y por la cual yo acudo a consultarle
a algún amigo
más sabio en jardines.
En el fondo crece
también
extrañamente
mi infancia.
Porque los fondos frescos han sido hechos
para los niños
y su asombro.
Y los bichos bolita,
qué duda cabe,
para levantar una piedra
y descubrirlos,
prehistóricos y con olor a humus.
Mi manguera es larga.
Quería una transparente
para espiar a las burbujas
pero sólo conseguí una opaca,
común,
de esas a rayas que existen iguales
desde que empecé a ser niña
hace 30 años.
Es larga porque el patio es profundo.
Tengo que cambiarla de canilla
para que llegue.
Con una canilla riego la parte de adelante
y cuando termino,
cuando acabo ese momento de humedades
y olores antiguos
(olores a madre,
a Santa Fe,
olores a sonidos perdidos hace rato)
cuando termino esa parte,
digo,
paso a la otra
y sigo
con la voluptuosa,
sencilla,
espléndida tarea
de regar las plantas;
maravilla olvidada luego de tantos años
de patio de cemento
y plantas escuálidas en macetas descascaradas.
Los elegidos
Yo los veo pasar
van como si nada
como si el amor no fuera
un objeto raro.
Tomados de la mano
acomodándose acaso
el pelo
como si se tratara de
comer, despertarse,
haber nacido.
Mi ciudad desde el río
Mi ciudad desde el río es otra
se llega a ella lentamente
y uno la sorprende
jugando a las sombras chinas
con la luz declinante de la tarde.
Mi ciudad desde el río
me habla de mí
me dice que soy dichosa
y que el mundo es grande
y de agua.
Los 3 poemas están incluidos en el libro “La Manguera”, de Editorial Diatriba.
* * *
muuy bueno cheee!
Te felicito por tu libro, quedó de once.
Y esa gran foto en el japo es de mi autoría ja!
nos vemos en el festival de rosario, si es q puedo ir...
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